Hoy os muestro las galletas de Comunión que hice para mi sobrina Lucía. En lugar del tradicional vestido llevan túnica, casualmente igual que todos sus primos, aunque les separen muchos kilómetros de distancia. Y es que las galletas han viajado hasta Berlín, eso sí, muy bien empaquetadas para que no sufrieran ningún percance.
MMMM! ya no queda ninguna... a Lucía le encantaron y estaba de lo más orgullosa de sus galletas. Muchas gracias!!!
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